lunes, 2 de marzo de 2015

PROMESA HECHA REALIDAD

Todavía recuerdo el Torneo Anual del Club de Golf Santa Anita en 2008 cuando vi a un chico de 17 años jugar la última ronda liderando la categoría principal como si estuviera jugando cualquier día de la semana con sus amigos. Ese día me propuse recordar su nombre porque nunca había visto a alguien jugar con tal soltura a esa edad y en esas condiciones. Aquella tarde Carlos Ortiz aún jugaba como amateur y no pudo acceder al trofeo ni al premio económico pero logro confirmarse algo así mismo mucho más importante: capacidad y mentalidad ganadora.

            Este fin de semana tuve la oportunidad de ver como en el tercer día del Northern Trust Open de la Gira PGA al posicionarse en tercer lugar, la cadena de televisión estadounidense tuvo que comenzar a transmitir sus tiros por obvias razones y me emocionó mucho ver como poco a poco este chico que vi hace ya casi 7 años va haciendo realidad su sueño de convertirse en uno de los mejores golfistas del mundo.

            Lo de Carlos es un caso muy similar al de Lorena Ochoa en su momento, que a base de esfuerzos individuales y familiares está poniendo la muestra de cómo deben hacerse las cosas en el ámbito deportivo al gobierno y demás autoridades. Es una pena que con todo el presupuesto que se les asigna no sean capaces de al menos sacar 1 tenista que pueda estar dentro de los 100 primeros del ranking por ejemplo, pero bueno ese es otro tema que ya tocaremos en otra ocasión.

            Su camino no ha sido fácil ya que primero tuvo que dominar la gira local de Guadalajara para luego probarse en los torneos más importantes a nivel nacional y una vez comprobados su gran talento y capacidad pudo optar por salir a estudiar fuera del país a la Universidad del Norte de Texas. Esto último de irte a otro país a temprana edad pues nunca es fácil porque conlleva dejar familia, amigos, comodidades, etc. pero claramente le ha beneficiado al tener una instrucción más profesional y competir en el máximo nivel.

            En el 2013 cuando se hizo profesional disputó la calificación para acceder a la Gira Web.com y lo logró. Habiendo conseguido el pase le faltaba el último escalón y el más difícil para acceder a la PGA. Afortunadamente todo inició bien para él y consiguió rápidamente una victoria en Panamá. Tres semanas después de su primer triunfo, la gira hizo parada en la ciudad de México y todas las miradas estaban puestas en Carlos por las ilusiones y expectativas que ya venía generando. Y sí, efectivamente el tapatío respondió de nuevo a la presión y se llevó todos los aplausos en el Bosque Country Club para conseguir la segunda victoria y se ponía a una más de poder garantizar su tarjeta para la PGA.

            Después de estos importantes triunfos, se vinieron unos meses más complejos por la misma ansiedad de estar tan cerca de lograr su objetivo y la tercera coronación tuvo que esperar un poco más. Finalmente en Agosto del año pasado llego la soñada tercera victoria en Portland y accedió a la tarjeta de tiempo completo en automático para la Gira PGA 2015, además de ser nombrado jugador del año de la Web.com.

Puedo decir con orgullo que ahora lo tenemos cada semana jugando entre los mejores golfistas como algún día se lo había propuesto y esperemos que después de este primer año lleno de aprendizajes pueda mantenerse ahí en lo más alto y por qué no, próximamente festejando alguna conquista. Después de todo ha demostrado que sabe conseguir sus metas y la suya es algún día ser el número 1 del mundo. Mucha suerte Carlos!!!

EL FACTOR BELICHICK

Les comento con orgullo que este es mi primer artículo relacionado con otro deporte que no sea el Fútbol; con todo merecimiento quería dedicarle unas palabras a este bellísimo y espectacular deporte que es el Fútbol Americano ahora que acabamos de pasar el Super Bowl 49.

Durante los días previos al Super Bowl se desató esta polémica de los balones desinflados por los Patriotas en la final de la conferencia americana y mucha gente quiso tomarse de ella para restarle méritos a este equipo de Nueva Inglaterra que ha resultado ser una de las mejores dinastías de este deporte. Debido a esta y otras polémicas que han rodeado en otros años a su coach Bill Belichick, un servidor al igual que muchos de ustedes hemos tenido dudas acerca de la veracidad o el real valor de los campeonatos logrados por los Patriotas bajo la dupla del entrenador con Brady. Bueno pues después de ver este último partido creo realmente que nos ha aclarado el panorama en gran medida y no se puede negar el legado durante este siglo de dicha organización. 

Empecemos pues por recordar toda la distracción que en si generó el tema mencionado de los balones, cualquier equipo hubiera perdido enfoque para el ansiado partido final y esto no sucedió con los Patriotas. Ellos eligieron el camino de la automotivación y unión grupal para tratar de encararlo de la mejor manera y lo lograron pues desde el principio se les vio más concentrados que su rival.

Ya avanzado el partido parecía que se llevaban ventaja al medio tiempo y sin embargo recibieron un duro golpe anímico por parte de Seattle que empató faltando pocos segundos para irse al descanso.  Si bien habían hecho mejor las cosas durante la mayor parte del primer medio, una intercepción a Brady y la gran eficiencia de los Halcones Marinos a la ofensiva les provocaron esta primer frustración de no irse al frente al descanso.

Para el tercer período el equipo de Seattle continuó con su buena racha y comenzó a despegarse  en el marcador, yéndose arriba hasta por 10 puntos y la defensiva controlando bastante bien a la ofensiva de los Patriotas. Justo ahí cuando parecía que el partido empezaba a definirse es donde entra la figura del coach Bill Belichick haciendo ciertos ajustes defensivos para frenar la inspiración de Russell Wilson, Matthews y Lynch, y así darle más tiempo a Tom Brady y su artillería de tener alguna reacción. Entonces apareció el temple del quarterback y jugadores como Gronkowsky y Edelman para remontar esa dura diferencia (previamente remontada sólo en 2 ocasiones en un SB).

Con todo y todo este deporte tan maravilloso estaba aún por regalarnos lo mejor: el final del partido. Habiéndoles remontado esa ventaja de 10 puntos, los Halcones Marinos salían al campo a buscar un Touch Down que les diera la gloria con más de 2 minutos todavía por jugar. Todo comenzó bien con un acarreo largo de Marshawn Lynch y un pase increíble que alcanzó a atrapar Kearse con mucha fortuna y que los puso a 5 yardas de la tierra prometida. He aquí cuando el momento crucial de todo se acerca pues el coach Carroll de Seattle con 3 oportunidades más para anotar decide pasar el balón en lugar de correrlo teniendo al mejor corredor de la liga a su disposición. Quizá con otro resultado todo mundo lo hubiera elogiado pero se olvidó que enfrente estaba un coach que prepara a sus equipos como pocos y ya habían entrenado esta jugada para que fuera interceptada.

A este gran ejemplo es al que quería llegar con el título de mi artículo y aunque honestamente no soy seguidor de los Patriotas no queda más que reconocer que la diferencia la hizo este señor. Guste o no, con polémica o no, con decisiones arbitrales dudosas o no, no cualquiera mantiene una regularidad como la que ha mantenido este equipo durante 15 años llámese el deporte que sea. Y aunque han buscado sacar ventaja en algunas cuestiones no del todo estrictamente éticas, seamos sinceros y preguntémonos quién no lo ha hecho?

RAZÓN O FRUSTRACIÓN?

            Ahora que ya han pasado 6 meses desde aquella nueva eliminación en octavos de final del Mundial de Fútbol 2014 ante Holanda y se supone que deberíamos tener ya la cabeza bien fría para analizar lo ocurrido ese 23 de Junio en Fortaleza, parece que aún no cicatriza la herida y lo cierto es que me sigue pareciendo injusto que un torneo tan sorpresivamente bien jugado por parte del equipo nacional haya terminado así de triste.

            Pero haciendo un esfuerzo por repasar todo lo ocurrido y encontrar la razón de ese nuevo fracaso me viene la duda si fue más culpa de nuestros propios fantasmas o fueron factores externos como la decisión arbitral del famoso penal. Ya en un mundial anterior habíamos sido víctimas de un error arbitral que marco bastante el rumbo de la derrota contra Argentina en Johannesburgo; por si no lo recuerdan me refiero al primer gol en fuera de lugar que marcó Higuaín cuando México dominaba ese partido. Por otro lado también podríamos recordar lo cerca que se estuvo en tiempos extra de 2006, el exceso de confianza contra USA en 2002, la remontada al final que también sufrimos contra Alemania en 98 y los benditos penales contra Bulgaria en 94. Hay un sinfín de recuerdos tristes y “ya meritos” en nuestra memoria que parecen perseguirnos a la hora crucial.

            Por lo tanto, creo que hay 2 aspectos claves para entender esto: El primero es que nos falta algo extra a la hora de definir las situaciones que podría ser la famosa mentalidad y el aprender de los errores cometidos en el pasado, pero por otro lado quiero ir a la injusticia que muchos llaman “parte del juego”.

            Creo que ya estuvo bueno de que en el fútbol se aplaudan estas malas costumbres que no hacen más que dañar el espíritu de lo que debe ser un deporte limpio y justo. No es posible que siendo el deporte más popular en todo el mundo sea el único donde todavía el error humano sea bienvenido. No sé ustedes pero yo estoy cansado de que partidos importantes alrededor del planeta, ya sean de clubes o de selecciones, sean definidos por una mala decisión de un tercero a quien le vale un cacahuate si su decisión fue acertada o no, y más allá de que pueda importarle, simplemente manche el esfuerzo y sacrificio de todo un equipo de trabajo que incluye a grupo de jugadores, cuerpo técnico y otros directivos durante un largo período de tiempo.

            En los inicios del deporte cabía la excusa de que no había aún mucha tecnología como para ponerla al servicio de los árbitros pero ahora cuál es la excusa? Cuál es el impedimento de que nos apoye? Para variar la respuesta conlleva adentrarse a un mundo oscuro y turbio que maneja la Federación Internacional de Fútbol Asociación (FIFA), la cual no ha hecho más que manchar el deporte durante las últimas 2 décadas. Será que tiene miedo de perder el control de algún aspecto del juego? Será que con eso ya no podría utilizar el error de un árbitro  para el amaño de partidos o algo parecido?

            Lo que es un hecho es que si en verdad se rigiera por el principio de ver por la mejoría y bien del fútbol ya habría tomado cartas en el asunto hace mucho tiempo y hoy por hoy no estaríamos hablando de si fue o no penal.

            En conclusión creo que México efectivamente lleva su culpa y cometió algunos errores de marca y quizá el entrenador en los cambios, pero no lo suficiente como para haber sido eliminados de esa manera cuando se jugó un mejor fútbol durante casi todo el partido que el equipo rival y es una pena que un error arbitral haya sido nuestra tumba.